martes, 14 de julio de 2015

El mejor juego de espionaje


Hace un tiempo que lo jugué, pero hoy me he puesto a repasar, aburrido, una parte de mis memorias videojugabilísticas. Existe un recoveco entre éstas dedicado a Rogue Warrior: nunca lo olvidaré. Rogue Warrior es a los videojuegos lo que el sexo con desconocidos a la salud: puede provocar el sida. Sin pasarnos de la raya, y sin más dilatación, comienzo mi crítica. Cuando hablamos de Rogue Warrior hablamos de uno de los soldados más reconocidos de América, aunque personalmente preferiría un pedo en la cara antes que un homenaje así. Como deducimos, estamos hablando de un shooter, es decir, un videojuego de disparos. Aunque yo pasé más rato lanzando el controlador contra la televisión que jugando; porque esa es otra, la campaña es más corta que la de cualquier Call of Duty de turno que sale hoy en día.

Por ello, tened los ojos bien abiertos, porque si parpadeáis se os va. Yo, aviso. En referencia a un apartado más técnico y gráfico, cabe destacar que el juego está en tres dimensiones. Y... tiene... texturas. De diferentes colores, entiéndase. No son unos malos gráficos, pero están muy por debajo del nivel de la actual generación y bastante mal aprovechados, ahora ya poniéndonos un poco en serio. Aunque si lo intentas jugar en un PC de carencia, hazte unas gafas 3D con cola y cartón porque así se disimulará un poco y evitarás sangramiento ocular agudo.

Pero la música mola, dentro de lo que cabe. Y el personaje está bien recreado. Pero si nos intentamos meter en el modo multijugador, vamos a sentir el mayor Forever Alone en mucho tiempo, por razones obvias.


Yéndonos al apartado jugable, hay que dejar algo claro: la IA es mala. Se han dado casos en que (teniendo en cuenta a Rogue Warrior como espía) avanzaba por el mapa y me hacía el pillín, así en plan:

-¡Eh, que te clavo mi cuchillito por aquí!
-¿Dónde estás, mi polizón favorito?
-¡Uy, que te clavo mi cuchillito por allá!
-Ay, ¡qué granujilla!

La inteligencia artificial es bastante tonta. Y las cinemáticas de asesinato, un poquitín caca. Pero debo destacar la fluidez con que se cambia de la primera a la tercera persona, eso está guay. En plan Deus Ex: Human Revolution, aunque a varios milenios luz de distancia de éste.

Pese a todo, Rogue Warrior es un excelente posavasos. Por cierto, una vez concluida mi crítica, no os lo toméis a mal si me he pasado un poco, intento tomarme con humor semejante adefesio aberrante. Sin querer faltar al respeto, he cagado cosas mejores que este juego.

No hay comentarios:

Publicar un comentario